- Distancias: 750 m - 20 Km - 5,4 Km
A nosotras nos tocó salir a las 15:40. Con algunos nervios, yo bastantes menos que en los duatlones que hecho hasta ahora aunque con la cosilla esa de que era mi primer triatlón y como saldría, sensaciones que tendría…
Nuestro equipo estaba formado por mi tocaya Oihana Quesada, Agurtzane, Nerea, Iratxe (en sustitución de Esti que no participo porque tenía que trabajar el viernes a la noche) y yo misma.
Para llegar a la salida teníamos que ir andando un tramo hasta llegar allí porque no coincidían los sitios de entrada y salida del agua. Cuando llegamos al punto de salida entramos al lago para remojarnos un poco antes de que nos tocara salir. Mi hermano ya me había dicho el agua del lago era oscura, de eso que vas nadando y no es que ya no veas al de adelante, no, es que al dar la brazada no ves ni tu propia mano. El agua marrón, muy sucia, buf! Que tirria al principio…
Preparadas en la línea de salida y piiiiiiiiii, suena el bocinazo que nos daba vía libre para dar rienda suelta a nuestros cuerpos serranos e intentar hacer algo más que flotar sobre el agua…
Txipli-txapla txipli-txapla cada una como podía parece que si que avanzábamos metros, bieeeeen, sin prisa pero sin pausa. Teníamos la suerte de que llevabamos una socorrista a nuestro lado que velaba por nosotras y nos guiaba en todo momento, super Oihana Quesada o como quien dice “la bolla móvil”, la clave para mi y supongo que para las demás también, no estaba en los bollones amarillos por los que había que pasar, sino en el gorro amarillo de “Gaztai” (para el que no lo pille: por lo de Quesada…).
Poco a poco en mis gafas crecía la niebla y entre la neblina que divisaba, mirada a la bolla móvil, mirada buscando en todo momento la cabeza de Gaztai, porque no me daba para ver más allá, tuve un momento en el que siguiendo y siguiendo a la bolla móvil parece que me fui para atrás con ella (en uno de esos momentos que ella iba hacía la que iba detrás) y menos mal que se dio cuenta a tiempo y empezó a decirme “nooo, noooo, hacía adelante, hacía alante”, y volví a enderezar el rumbo. Gaztai andaba relajada, nadando para atrás, para adelante (solo le faltaba silvar) pendiente de nosotras, nadando desde la que iba más adelante hasta la que iba detrás, para que no se le descarriará el rebaño, así que en total a nuestra Gaztai en vez de 750m le saldrían unos 1500m de nado…
La salida del agua fue traka. Lógicamente Oihana salió la primera y cuando salí yo me soltó la parte de atrás del neopreno para que siguiera quitandome yo sola y se fue a por la siguiente para ayudarle… Yo seguí quitándome el neopreno pero me costaba y oí a alguno que me decía desde fuera que me sentara en el suelo para quitarme el traje, porque entre los nervios y todo, ahí andaba yo tira que te tira y el neopreno atascado en la pierna asi que llegó Iratxe y le levante el pie y le dije que me ayudará, tiro del neopreno y por fin salió, bieeeeeen!! Me levante y las dos fuimos a ayudar a las siguientes, Agurtzane estaba detrás así que le cogimos entre algunas y empezamos a tirar del neopreno empujando para abajo, que show, 3 o 4 personas quitando el neopreno a otra… si señor! Eso es un equipo, eso es trabajo en equipo!!
Luego cogimos la bici y entonces Oihana le dio el relevo de guia a Agurtzane. A veces tiraba ella y otras yo, mientras yo tiraba ella al igual que Oihana en el agua estaba pendiente de que no se quedará nadie atrás. Hubo un momento que nos pusimos en forma de escalera, Agurtzane me puso en una esquina y a la que iba detrás en la otra e hicimos una línea en diagonal de forma escalonada, vamos, very profesionals.
Nos pasó un grupo de tios todo acoplados más very profesionals que nosotras que pasaron como balas y todas nos pusimos a gritar emocionadas jajajaja ala alaaaaaaa
Hay anduvimos con otro equipo mixto que iba delante que si nos pasaban que si les pasábamos… que ibamos a un ritmo parecido y el juez de la moto venga a darnos la kaka pensando que estabamos chupandoles la rueda y esa no era nuestra intención, total que al final nos acabo sacando la tarjeta amarilla que la vieron las de atrás porque yo no me enteré.
Durante la bici ibamos dandonos ánimos entre nosotras, gritándonos ánimos.
Luego la carrera a pie también tuvo sus cosas, yo hasta después del avituallamiento no me encontraba muy cómoda corriendo por el esfuerzo que había hecho sobre la bici notaba las piernas muy agarrotadas. Nos cruzamos con el equipo de los “Pros” (jijiji) del equipo un par de veces y al cruzarnos nos poníamos en fila y nos chocábamos las manos gritando “ueeeeeeeee” y animando el cotarro. Y al llegar a meta nos agarramos las 5 en un circulo, como una piña y empezamos a saltar y a gritar de alegría. Aquí esta la super foto de la llegada... Por cierto, que Agurtzane no se si pillo alguno de los mocos que solté sobre la bici para que aparezca con ese fleki tan modernoooooo jejeje muy bueno!
Nuestro equipo estaba formado por mi tocaya Oihana Quesada, Agurtzane, Nerea, Iratxe (en sustitución de Esti que no participo porque tenía que trabajar el viernes a la noche) y yo misma.
Para llegar a la salida teníamos que ir andando un tramo hasta llegar allí porque no coincidían los sitios de entrada y salida del agua. Cuando llegamos al punto de salida entramos al lago para remojarnos un poco antes de que nos tocara salir. Mi hermano ya me había dicho el agua del lago era oscura, de eso que vas nadando y no es que ya no veas al de adelante, no, es que al dar la brazada no ves ni tu propia mano. El agua marrón, muy sucia, buf! Que tirria al principio…
Preparadas en la línea de salida y piiiiiiiiii, suena el bocinazo que nos daba vía libre para dar rienda suelta a nuestros cuerpos serranos e intentar hacer algo más que flotar sobre el agua…
Txipli-txapla txipli-txapla cada una como podía parece que si que avanzábamos metros, bieeeeen, sin prisa pero sin pausa. Teníamos la suerte de que llevabamos una socorrista a nuestro lado que velaba por nosotras y nos guiaba en todo momento, super Oihana Quesada o como quien dice “la bolla móvil”, la clave para mi y supongo que para las demás también, no estaba en los bollones amarillos por los que había que pasar, sino en el gorro amarillo de “Gaztai” (para el que no lo pille: por lo de Quesada…).
Poco a poco en mis gafas crecía la niebla y entre la neblina que divisaba, mirada a la bolla móvil, mirada buscando en todo momento la cabeza de Gaztai, porque no me daba para ver más allá, tuve un momento en el que siguiendo y siguiendo a la bolla móvil parece que me fui para atrás con ella (en uno de esos momentos que ella iba hacía la que iba detrás) y menos mal que se dio cuenta a tiempo y empezó a decirme “nooo, noooo, hacía adelante, hacía alante”, y volví a enderezar el rumbo. Gaztai andaba relajada, nadando para atrás, para adelante (solo le faltaba silvar) pendiente de nosotras, nadando desde la que iba más adelante hasta la que iba detrás, para que no se le descarriará el rebaño, así que en total a nuestra Gaztai en vez de 750m le saldrían unos 1500m de nado…
La salida del agua fue traka. Lógicamente Oihana salió la primera y cuando salí yo me soltó la parte de atrás del neopreno para que siguiera quitandome yo sola y se fue a por la siguiente para ayudarle… Yo seguí quitándome el neopreno pero me costaba y oí a alguno que me decía desde fuera que me sentara en el suelo para quitarme el traje, porque entre los nervios y todo, ahí andaba yo tira que te tira y el neopreno atascado en la pierna asi que llegó Iratxe y le levante el pie y le dije que me ayudará, tiro del neopreno y por fin salió, bieeeeeen!! Me levante y las dos fuimos a ayudar a las siguientes, Agurtzane estaba detrás así que le cogimos entre algunas y empezamos a tirar del neopreno empujando para abajo, que show, 3 o 4 personas quitando el neopreno a otra… si señor! Eso es un equipo, eso es trabajo en equipo!!
Luego cogimos la bici y entonces Oihana le dio el relevo de guia a Agurtzane. A veces tiraba ella y otras yo, mientras yo tiraba ella al igual que Oihana en el agua estaba pendiente de que no se quedará nadie atrás. Hubo un momento que nos pusimos en forma de escalera, Agurtzane me puso en una esquina y a la que iba detrás en la otra e hicimos una línea en diagonal de forma escalonada, vamos, very profesionals.
Nos pasó un grupo de tios todo acoplados más very profesionals que nosotras que pasaron como balas y todas nos pusimos a gritar emocionadas jajajaja ala alaaaaaaa
Hay anduvimos con otro equipo mixto que iba delante que si nos pasaban que si les pasábamos… que ibamos a un ritmo parecido y el juez de la moto venga a darnos la kaka pensando que estabamos chupandoles la rueda y esa no era nuestra intención, total que al final nos acabo sacando la tarjeta amarilla que la vieron las de atrás porque yo no me enteré.
Durante la bici ibamos dandonos ánimos entre nosotras, gritándonos ánimos.
Luego la carrera a pie también tuvo sus cosas, yo hasta después del avituallamiento no me encontraba muy cómoda corriendo por el esfuerzo que había hecho sobre la bici notaba las piernas muy agarrotadas. Nos cruzamos con el equipo de los “Pros” (jijiji) del equipo un par de veces y al cruzarnos nos poníamos en fila y nos chocábamos las manos gritando “ueeeeeeeee” y animando el cotarro. Y al llegar a meta nos agarramos las 5 en un circulo, como una piña y empezamos a saltar y a gritar de alegría. Aquí esta la super foto de la llegada... Por cierto, que Agurtzane no se si pillo alguno de los mocos que solté sobre la bici para que aparezca con ese fleki tan modernoooooo jejeje muy bueno!
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