Como me he apuntado al duatlón cross de Santillana, me veo obligada a volver a sacar de paseo a mi TriNocleta de monte. Antes sólo tenía ojitos para ella, sólo existía ella en mi vida, pero vino la otra, la TriNocleta de carretera y la pobre se quedó en segundo plano...
Hoy hemos vuelto a rodar por las faldas del monte que da nombre a nuestro equipo. 45 minutillos que no han estado mal para volver a coger confianza una con la otra (TriNocleta BTT y yo), poco a poco.
He vuelto a disfrutar del paisaje, del ambiente, animales... Me he topado con unos cuantos caballos por el camino. Aquí dos de ellos, los he encontrado en la bajada, volviendo a casa.
Más adelante he vuelto a parar a sacar al trio lalala, osease, tres maravillosos ponis. Cual es mi sorpresa al acercarme que dos de ellos (sobre todo uno), empieza a posar para la foto. Nunca me había pasado esto. Será presumido! Jajaja! Saco una foto y parece más interesado aún en que le saque otra y su amiguito no se queda muy atrás tampoco (los dos de la derecha). No me digáis que la foto no es de traca.
Por cierto, ya no se puede andar un@ con chiquitas con estas temperaturas. Más vale abrigarse si a la bajada no quiere uno congelarse...
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