Lo sé. Ha sido parir y no parar. Esto es como una droga. Alguien dijo hace poco "acabamos una carrera y ya estamos pensando en la siguiente". Si, parece ser verdad. A mi también me pasa, eh Remen?
Parecía que este año iba a ser más tranquilo (por el embarazo, parto, niña...) pero en cuanto la matrona me dió luz verde arranqué como una moto y ahora me cuesta parar.
Un año quietecita y engordando... al final ha llegado Pedro con las rebajas. Tengo el cuerpo desatado y con ganas, aunque no en todo momento claro. También paso por esas pequeñas crisis de "no me apetece salir a entrenar", "quiero dormir", "que bien se está en el sofa"... todos los días no son iguales. Hoy estas eufórico y mañana desganado, cansado...
Se me ha ido la olla. He visto el duatlón de Santillana y me he tirado de cabeza. De montaña, si! y que? Bueno, ya pararé. Estoy disfrutando de mi maternidad pero de lo que me ha estado faltando también, del deporte. Sabía que podían ser compatibles, aunque haya gente que piense que el ser madre significa estar las 24 horas del día a ello. Pues no, las madres también podemos ser más, madres deportistas, y esto es lo mejor de todo.
Vivo mi pequeña temporadilla. Aún la 2011 queda lejos. Disfrutemos el momento...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario!