El día amaneció perfecto, bueno solo una cosa seguía fastidiando un poco, el viento.Conocimos un poquito Roses, fuimos a desayunar un café y luego a la plaza del mercado. Ya luego fuimos a conocer las calas que caían por ahi.
Parecía que la carretera estaba bien pero al pasar Cala Montjoi el camino estaba otra vez sin asfaltar, asi que para continuar hasta Cala JonCols decidimos dejar la furgo aparcada (por el bien de los amortiguadores) y continuar en bici además de que el día era ideal. Unos bocatas a la mochila y a rodar.
Por fin llegamos a Cala Joncols. Otra cala muy chula. Nos quedamos allí a comer el bocata, en la playita al lado de las rocas resguardandonos del viento, pero a pesar de que lucía el sol y no haber ninguna nube no te podías quedar mucho tiempo quieto pues el viento hacía que la sensación térmica fuera de friiiio.
Después fuimos hacía Empuriabrava que en la oficina de información nos contaron que fue una zona que antes era agua, luego lo secaron y construyeron las casas. Este pueblo también es precioso sobre todo por la peculiaridad de que sus "calles" no son eso, sino canales de agua. Las casas con su barco a pie de puerta, alucinante. Quien pudiera!
La playa era super larga y había una zona con soportales con un montón de restaurantes y tiendas. Vimos pasar unos cuantos coches de los que normanlmente no vemos por cualquier sitio, de esos que se ven poco, algunos antiguos, otros "raros" y otros modernos...
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